Las sucursales estarán cerradas y no habrá atención al público, pero se podrán hacer algunos trámites por home banking, las aplicaciones de teléfonos celulares, los cajeros automáticos y se mantendrá la posibilidad de retirar dinero en efectivo en los comercios.
El 6 de noviembre no funcionarán los bancos en todo el país, debido al Día del Empleado Bancario. La cláusula octava del acuerdo salarial 2020 establece que los dependientes deben cobrar la compensación antes de esa fecha.
«Las partes acuerdan el pago de una compensación extraordinaria no remunerativa, consistente en un pago de $ 56.980,86, con motivo de la celebración del día 6 de noviembre «Día del Bancario», establece el acuerdo.
Asimismo, a dicha suma se adicionará la resultante de multiplicar el importe de $ 7.549,53 por el coeficiente salarial correspondiente para cada categoría. Lo expuesto en la presente cláusula será de plena aplicación para todos los trabajadores bancarios, incluyendo los trabajadores de Call Center.
El pago se efectuará antes del 6 de noviembre del 2020. En los casos de las entidades cuya base de cálculo sea mayor a la aquí convenida, se deberá aplicar el método de cálculo establecido en la presente cláusula, garantizándose la condición más favorable al trabajador».
De tal manera, por ejemplo, para el nivel inicial la compensación como mínimo ascenderá a $ 64.530,40.
En la actualidad, la Asociación Bancaria que defiende los derechos de los trabajadores es liderada por Sergio Palazzo.
En abril de 1919, 3500 bancarios sentaron las bases de la organización sindical e iniciaron la primera gran huelga bancaria, explica la entidad.
La institución fue fundada oficialmente en 1924, con una membrecía inicial de 1.500 afiliados.
Desde entonces, la Convención Colectiva estipula que se detenga la actividad bursátil, financiera y bancaria. Por ese motivo, cada 6 de noviembre solo se pueden realizar operaciones a través de los cajeros automáticos.
La asociación anteriormente mencionada luchó por los derechos de estos trabajadores para reducir la jornada laboral que se extendía por aquel entonces hasta 12 horas.
Entre las grandes huelgas, se destacan las de 1958 y 1959, en la cual realizaron paros que se extendieron hasta 69 días.