LOCALES
[Publicación pedida] Infinitamente agradecida

Ahora sí, ahora que el tiempo para mí volvió a andar, se me hace necesario escribir.

Chivilcoy, 03 de enero de 2024

Ahora sí, ahora que el tiempo para mí volvió a andar, se me hace necesario escribir.

El 15 de diciembre fue el día en que se detuvo el tiempo, y comenzó otro, el tiempo en el que Feli, mi sobrino, comenzó a luchar con todas sus fuerzas por su vida. Andando en bici sucedió, sí, andaba en bici, como muchos chicos de su edad, con tan solo 12 años, lo terrible llegó. Ese llamado para avisarme que Feli había tenido un accidente y estaba en terapia intensiva, escalofríos y una inmensa angustia invadió mi cuerpo y mi corazón. Las palabras “su estado es crítico” aún resuenan en mi cabeza como una pesadilla.
Y en el medio de ese tiempo sin tiempo, en el que flotaba sin saber qué hacer, qué decir, como actuar, porque todo a mi alrededor se derrumbaba, apareció ella, la médica Marina Ferreira, quien, con su humanidad, profesionalismo, prudencia, respeto, templanza, nos informaba cada pequeño paso que daban con y por Feli. Allí también estaba la médica pediatra Nieves Miguelissi, quien junto a Marina nos dieron aliento, ese aliento vital para poder continuar.

Allí también estuvieron las enfermeras, a las que veía ir y venir a paso acompasado, atendiendo con amorosidad y conmovidas por ese pequeño al que estaban cuidando.

Fueron muchas y muchos las y los profesionales que con vocación, humanidad y profesionalismo estuvieron ahí para Feli. Infinitamente agradecida a cada una/o de los integrantes de los equipos de Terapia y Pediatría del Hospital Municipal de Chivilcoy. Si bien siempre levanté y defendí la bandera de la salud pública, ahora me tocó vivir desde adentro, y me atravesó el cuerpo el sentir la importancia que contemos con un Hospital Público con profesionales con un compromiso por su tarea admirable.

Luego llegó ese momento en el que lo mejor para Feli era trasladarlo en vuelo sanitario a un Hospital pediátrico. Y allí nuevamente Marina y Nieves junto a todo un equipo, se ocuparon enteramente de realizar un trabajo titánico para que ello ocurriera ya de forma articulada con Región Sanitaria X y el SIES, del estado provincial, en dónde se realizó un despliegue del que participaron también los médicos Marino y Azuaje, los enfermeros y enfermeras Lasala, Varela, Runzio, Scirica, Burgos y Laurella. Lamento no contar con los nombres de pila de cada uno.

Feli fue acompañado en dicho vuelo sanitario por dos médicos de apellido Dos Santos y Lobos. El despliegue estuvo a cargo del médico Luis Capobianco, y la médica Marina Ferreira. También participaron personal policial de la Subestación Dardo Garelli y una dotación de bomberos voluntarios de Chivilcoy, a cargo de Marcelo Serrano.

Todos y todas hicieron posible que Feli llegara al Hospital Público de niños “Pedro de Elizalde” de la ciudad de Buenos Aires. Y allí comienza otro capítulo de esta historia, del que sólo contaré que Feli permaneció por 17 días, con una atención y cuidados de excelencia, con respeto y humanidad.

Fueron 18 días, de un tiempo sin tiempo, y hoy puedo decir con inmensa alegría y emoción que Feli está nuevamente en su casa, recuperándose de manera increíble.

Estaré por siempre agradecida a cada una de las personas que hicieron posible que esta historia tenga un final feliz!!!

Agradezco cada velita encendida, cada oración, cada rezo, cada pensamiento por Feli. Todo el amor y acompañamiento recibido de los afectos, se sintió y llegó!!!

María José Valletta Goicoechea
DNI 29.428.800