La licenciada en Nutrición, Regina Gómez, hizo énfasis en la importancia de dejar a un lado las dietas restrictivas, cambiando ese concepto por la idea de tener una alimentación consciente, y llamó la atención sobre la enorme cifra de personas con trastornos alimenticios en nuestro país.
Dejar a un lado la idea de dietas restrictivas
Respecto a las dietas restrictivas fue tajante al decir que “no funcionan, ya que el 95% de las personas vuelven a recuperar el peso que tenían, o incluso más. Cuanto más prohibido está el alimento, más deseo genera”.
Alimentación consciente
En este sentido, en cuanto a apuntar a una alimentación consciente, sostuvo: “Cada uno debe guiarse escuchando a su cuerpo, la persona no se puede desconectar de las señales que brinda su organismo. Por eso el nutricionista debe generar que el paciente tenga una alimentación intuitiva, es decir conectarnos con estas señales y no transgredirlas, como cuando uno dice tengo hambre, aunque en realidad no, debe ser ansiedad. Hay que saber que el hambre es fisiológica. No hay que tenerle miedo a comer ni a algunos alimentos”.
“Hay que tomarse el tiempo para comer, lo que requiere sentarse y concentrase en eso. Esto también tiene que ver con el pensamiento dietante, en que nos hicieron creer que la comida era una enemiga”, remarcó.
Tiempo, paciencia y constancia
“Para generar un hábito alimenticio saludable se necesita tiempo, paciencia y constancia”, puntualizó Gómez. “No podemos programar fechas, por ejemplo, llegar al verano; debemos compararlo con lo que nos lleva aprender a tocar un instrumento o hablar un idioma distinto, no sabemos cuánto tiempo nos va a llevar”, señaló.
A lo que agregó: “Tampoco debemos concentrarnos en el peso, muchas veces con las dietas pasa a eso, como son a corto plazo, en principio se logra el objetivo, pero muchas veces a costa de que lo pasamos mal, estamos sufriendo. También es un gran error pensar que es correcto sacar grupos alimenticios completos y vivir con abstinencia”.
“Debemos saber que es importante tener una alimentación con todos los grupos de alimentos, porque cada uno cumple su función”, apuntó.
Asimismo, hizo hincapié en que “no hay que confiar en los polvitos mágicos, que promocionan fundamentalmente por la televisión. Si bien lo habían prohibido por publicidad engañosa, le buscaron la vuelta para poder promocionarlo nuevamente”.
“Mucha gente se acerca al consultorio a preguntar por esto y me dice, pero si Tinelli lo publicita debe ser seguro. Hay que tener cuidado con estas cosas”, dijo.
Ley de Etiquetado Frontal
En cuanto a la ley de Etiquetado Frontal de alimentos, indicó que “se trata de un debate muy amplio”. “Por un lado, lo bueno es que nos va a ayudar a elegir que alimentos queremos comer sabiendo cómo están compuestos”, expresó.
“Pero no debemos perder de vista, que también hay personas que tienen una obsesión por consumir alimentos saludables, entonces al ver esas etiquetas se pueden generar más problemas”, añadió.
Trastornos alimenticios
“Argentina es un país que tiene graves problemas en cuanto a los trastornos alimenticios, aunque muchas se pasan por alto”, advirtió la especialista, por lo que recomendó que “más allá de la ley, lo importante es que ya desde las aulas se hable de la nutrición; lo bueno sería que venga acompañada de información”.
La importancia de la escucha en el consultorio
“Como profesional siento que es fundamental escuchar a los pacientes, para poder generar ese vínculo que permita que funcione y que el otro se sienta cómodo. Pero no creo en la idea de control o de retar al paciente”, aseguró.