PUBLICACIÓN PEDIDA
Desde el Municipio y la dirección del Hospital, en nombre de la seguridad se están llevando a cabo acciones de control desmedido que vulneran los derechos de los trabajadores de la salud, y generan una distancia con los pacientes, que alteran notablemente el desarrollo de las funciones cotidianas, generando una sensación de incomodidad y miedo.
Las instituciones públicas de salud son una herramienta fundamental de protección y cuidado, y las acciones del estado deben estar comprometidas en favorecer el acceso universal de todos los ciudadanos; es su función promover la accesibilidad y máxima cobertura en pos de garantizar el pleno acceso a la salud. De ninguna manera avalamos acciones que tiendan a generar barreras, y mucho menos a estigmatizar y expulsar a las personas (trabajadores y pacientes). Como así tampoco avalamos ningún tipo de violencia.
Más puertas cerradas, más controles policiales, más cámaras no son la solución; sino generadoras de conflicto, que segrega, y nos aleja, profundizando el malestar generalizado.
Para una verdadera política de seguridad, que impacte en la calidad de vida cotidiana, ¡no se necesita profundizar la brecha… se requiere mayor inversión en política sanitaria! Y mayor presencia en los barrios con políticas de inclusión social.
NO SOMOS UNA AMENAZA
Apelamos, como Asociación Sindical de Profesionales de la Salud que velamos por los derechos de los trabajadores, que estos temas sean abordados y discutidos de manera constructiva en el espacio de mesas de Salud y las tan negadas a nuestro Sindicato por parte del ejecutivo, como son las mesas de negociación Paritaria.