Fernández dijo que desde ahora todos tendrán permiso para hacer salidas recreativas, con hasta dos niños. La cuarentena se mantendrá estricta en grandes ciudades y más flexible en las de menos de 500 mil habitantes.
El presidente Alberto Fernández anunció este sábado la extensión de la cuarentena obligatoria para contener el coronavirus hasta el 10 de mayo. En un mensaje grabado de 24 minutos, el mandatario anunció el inicio de una nueva etapa del aislamiento preventivo social y obligatorio: se permitirán salidas de esparcimiento durante una hora y se la cuarentena en ciudades de menos de 500 mil habitantes.
Según las proyecciones oficiales, esta nueva etapa permitirá significará hasta un 50 por ciento de movilidad en las ciudades pequeñas. En cambio, seguirá el aislamiento estricto en los conglomerados más grandes. Capital, Gran Buenos Aires, Mar del Plata, Córdoba, Gran La Plata, Rosario, Santa Fe, Gran Mendoza, Gran San Juan, Salta y Tucumán.
Otra vez primó el consejo de los infectólogos, con los que el mandatario estuvo reunido el jueves. Las personas de todas las edades y del todo territorio nacional podrán salir de sus hogares diariamente durante una hora de hasta una hora en un radio de hasta 500 metros de su domicilio.
Los adultos podrán salir hasta con dos niños y la medida alcanzará también a los grupos de riesgos: adultos mayores y personas con patologías previas. El gobernador bonaerense, Axel Kicillof, y el jefe de Gobierno de la Ciudad, Horacio Rodríguez Larreta, los ejecutivos de los distritos más afectados por el virus, resistían la medida. Aunque ahora analizaban cómo llevar adelante la nueva disposición. «De alguna manera tenemos que acompañar al Presidente», decían.
No haría falta tramitar ningún permiso para los desplazamientos, según adelantaron fuentes oficiales.
En tanto, las ciudades donde viven menos de medio millón de habitantes podrán flexibilizar aún más la cuarentena siempre no sean de transmisión comunitaria; el tiempo de duplicación sea menor de 15 días; el sistema de salud esté en condiciones de atender la demanda y no se habilite más del 50 por ciento de la población del distrito para trabajar.
En los grandes centros urbanos, en cambio, el aislamiento seguirá como hasta ahora. El Presidente firmará un Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) se publicará en las próximas horas. “Vamos a permitir que la mitad de la población se movilice. Vamos a hacer una segmentación epidemiológica. En todas las grandes ciudades, el aislamiento sigue igual”.”, informó Fernández en el mensaje que grabó minutos antes de que fuera emitido, a las 21.05, tras una larga jornada donde primó el silencio y el hermetismo oficial.
Al igual que el 10 de abril, el jefe de Estado apoyó sus argumentos para continuar con la cuarentena en imágenes en una pantalla. Esta vez el formato no permitió preguntas. Lo acompañaban el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, y el ministro de Salud Ginés González García -en primera fila, – y el ministro del Interior, Eduardo “Wado” de Pedro, y la secretaria de Acceso a la Salud, Carla Vizzotti, más atrás.
A pesar de las actividades autorizadas en una decena de provincias, numerosas restricciones seguirán como hasta ahora en todo el territorio nacional. La Administración Pública continuará funcionando con las dotaciones mínimas establecidas; además seguirán suspendida las clases presenciales en todo el país y los eventos públicos y privados.
Los centros comerciales, clubes y centros culturales se mantienen cerrados. Las fronteras seguirán clausuradas para el ingreso de extranjeros. En tanto, el transporte interjurisdiccional continuará sin funcionar.
“Quedan dos etapas (de la cuarentena)”, adelantó el mandatario. La próxima se inaugurará cuando el promedio de duplicación de los contagios sea mayor a los 25 días. Entonces se permitirá una circulación de hasta el 75 por ciento de la población. En las fases previas, fue de 5 días; de 5 a 15 días y la actual; de 15 a 25 días. Fernández pidió otra vez minimizar lo máximo posible el uso del transporte público, principal foco de contagio.
El Presidente, que ya había recogido el respaldo de los gobernadores para proseguir con la cuarentena, envió un mensaje a los sectores políticos, económicos y sociales que reclaman una mayor flexibilización. “Yo prefiero que una fábrica no trabaje por que sus empleados no trabajen que por que estén infectados”, sentenció el mandatario.
El jefe de Estado, que por la mañana estuvo reunido con el ministro de Economía, Martín Guzmán y con el titular del Banco Central, Miguel Pesce, dedicó la primera parte de su discurso a la economía.
“La pandemia genera conflictos económicos, somos conscientes de eso y hay muchos argentinos que tienen que volver a su vida habitual. Tenemos que ser cuidadosos. Estamos trabajando en todos los planos”, señaló antes de agregar que durante esta semana se trató de resolver el problema de la «deuda heredada». En los próximos días, el mandatario firmará nuevos decretos para un barril de petróleo criollo y para eliminar el IVA a las importaciones de insumos críticos.
Cerca del mandatario insistieron en que la cuarentena goza de un altísimo nivel de aprobación entre la ciudadanía; mucho mayor del que reflejan los medios. El jefe de Estado, en su discurso apeló a la responsabilidad social.
Por la tarde, el Presidente se reunió con los ministros que lo acompañaron en la presentación y con la secretaria Legal y Técnica, Vilma Ibarra, para avanzar en el DNU de la extensión de la cuarentena que se publicará en las próximas horas.
Cafiero y el ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, en tanto, seguirán atendiendo los pedidos de los gobernadores para autorizar nuevas excepciones y el retorno de nuevas industrias. El Presidente, también utilizó parte de su discurso para reafirmar que todas las medidas que tomó su administración fueron consensuadas y siguieron un plan que permitió «ganar tiempo» y fortalecer el sistema sanitario del país y las provincias. «La salud nos volvió a unir», insistió el mandatario.
[Crédito: Clarín]