COMUNICADO
Tiempo de decidir nuevas medidas.
Habiendo transcurrido ya los tres primeros meses del año, con los problemas acuciantes que padecemos a diario en los hospitales y centros de salud, es tiempo de avanzar colectivamente hacia la implementación de las mejores medidas que reclamen con fuerza la falta de convocatoria a paritarias para discutir salarios y condiciones de trabajo.
Así lo evaluó el Consejo Directivo Provincial que se reunió el viernes 29 de marzo, dando cuenta en sus discusiones de la necesidad de preparar e impulsar asambleas en todas las seccionales con vistas al Congreso de Delegados que sesionará el sábado 6 de abril, honrando la democracia de base que nos caracteriza como gremio.
Los docentes bonaerenses recibieron esta semana una propuesta paritaria que prevé, para todo el 2019, una cláusula de actualización automática cada tres meses de acuerdo a la inflación, así como la posibilidad de algún nivel de recuperación de la pérdida salarial del 2018. La oferta aún no fue respondida porque los sindicatos del sector están realizando respectiva.
Después del ruinoso acuerdo que cerraron los gremios amigos del poder para los trabajadores enmarcados en la ley 10430, con un magro 20 % en cuotas para todo el año, el Gobierno parece haber tomado nota de que la grave situación económica, con los aumentos constantes de alimentos de primera necesidad, tarifas de transporte y de servicios, hace inviable repetir semejante propuesta sin desatar un escenario de conflicto con los gremios bonaerenses cuya discusión está en curso o que aún no han sido convocados a paritarias.
Sin embargo, como cada año, con este gobierno y con los que lo antecedieron, los trabajadores sabemos que serán la lucha y el conflicto que podamos llevar adelante los que nos pondrán en las mejores condiciones no sólo para ser convocados, sino también para que la propuesta sea digna de ser considerada.
Salarios, condiciones de trabajo, interinización de becarios, resolución de concursos de ingresos y funciones, reclamos demorados, residentes, situación previsional y políticas de género conforman el pliego que tiene que ser abordado en la mesa paritaria de los profesionales de la Salud.
La dilación en la convocatoria no hará sino profundizar aún más la crisis en el sistema de Salud provincial con graves consecuencias para la situación sanitaria de la población bonaerense en su conjunto. La extensión de la crisis.
En la semana se dio a conocer las cifras oficiales que dan cuenta de la situación a la que las políticas que lleva adelante desde su llegada al poder la Alianza Cambiemos han empujado a grandes sectores de la población.
Según el INDEC, en el segundo semestre de 2018 las personas bajo la línea de pobreza llegan al 32% y la indigencia alcanza al 6,7 %. Cuando se las desagrega a partir de la edad, las cifras muestran, entre otros datos preocupantes, que un 46,8 % de los menores de 14 años son pobres.
El estudio llevado adelante por el Observatorio de la Deuda Social Argentina (UCA), también publicado en esta semana, señala además que las desigualdades entre es tratos socioeconómicos han continuado creciendo y es en el conurbano bonaerense donde se concentran las mayores proporciones de exclusión. La pobreza en sus aspectos multidimensionales incluye la falta de cobertura de necesidades básicas de atención de la salud e inseguridad alimentaria severa.
Ambos aspectos traen consecuencias a corto y mediano plazo sobre las condiciones sanitarias de quienes transcurren por las instituciones de la Salud Pública donde, además, fruto de políticas de ajuste y presupuestos a la baja, la atención adecuada no está garantizada como debiera.
La extensión de la crisis, en la cual un 30% de los hogares se encuentra marginado de los derechos laborales, alcanza no sólo a quienes han perdido su trabajo o están precarizados, sino también a sectores que perciben salarios en forma regular, pero insuficiente para cubrir sus necesidades, así como a jubilados, pensionados y beneficiarios de la asignación universal por hijo.
Una convocatoria fragmentada, pero necesaria frente a este panorama, resultado de la debacle económica producida por las decisiones de quienes nos gobiernan, y pese a que están dadas todas las condiciones para medidas más contundentes, las centrales de trabajadores en sus diversas expresiones siguen sin estar a la altura de las circunstancias.
Resulta inadmisible que aún no se haya podido avanzar hacia un paro general que dé cuenta concreta del profundo malestar que se advierte a diario en la calle. Finalmente, apareció en el horizonte la fecha del jueves 4 de abril, anunciada por la CGT para convocar a una movilización en defensa del trabajo, la producción, la soberanía y la justicia.
También llaman a movilizar, ese mismo día, la CTA de los Trabajadores (exigiendo la declaración de emergencia alimentaria y tarifaria entre otras) y la CTA Autónoma bajo el reclamo de “trabajo, producción, soberanía, justicia e ingresos dignos”, así como las organizaciones sociales que se suman a la convocatoria bajo consignas similares.
Aún con este alto grado de fragmentación, de dificultad para unificar los reclamos y de la ausencia de un programa claro que garantice continuidad y mayor fortaleza, la movilización será un hecho político importante. Así lo debatió el Consejo Directivo Provincial que resolvió llamar a Jornada de Lucha, instando a formar parte de las acciones públicas de ese día. Lo haremos, como tantas otras veces, con nuestras propias consignas en defensa de la Salud Pública y como parte de la clase trabajadora que reclama por mejores condiciones de vida para todos.
La Seccional CICOP Chivilcoy continúa reclamando por su derecho constitucional para participar de la mesa de negociación paritaria de cierre del 2018 en la cual todos los trabajadores municipales quedaron a más de 12 puntos por debajo del índice inflacionario.
También se reclamó ante el Secretario de Salud por la falta de respuestas por nombramientos en el área de Hospital Municipal y en los centros de salud, por el incumplimiento del pago de insalubridad para todos los trabajadores de la Salud Pública aprobado en ordenanza con el voto de todos los bloques de concejales, por participar en discusiones de políticas sanitarias por medio de las mesas de salud suspendidas durante 2019.
Además, se brindó todo el apoyo al Secretario de Salud para que se resuelva cualquier problema que perjudique el normal funcionamiento de los servicios de Salud Pública, especialmente, por reclamar juntos ante el ex Ministerio de Salud de la Nación sobre una deuda muy significativa que mantiene con el Municipio de Chivilcoy por el Programa Médicos Comunitarios, situación que en palabras del Secretario de Salud ha dificultado la compra de equipamientos importantes para dos áreas cerradas del Hospital Municipal y pone en riesgo la incorporación de los profesionales de este programa a la planta Municipal.