Ayer falleció Lito Rizzo, quien durante muchos años estuvo encargado de las canchas de tenis y del quincho del Club Gimnasia, en la Avenida de Tomaso; un apasionado de tango y de la radio, pasiones a las que le dedicó muchos años de su vida.
Con pesar recibí esta mañana la noticia del fallecimiento de Lito. Como en un flashazo vinieron a mi memoria muchísimos recuerdos de mi juventud, en incontables mañanas y tardes transcurridas en las canchas de tenis del Club Gimnasia, momentos que nunca olvidé, pero que hoy volvieron todos juntos traídos con nostalgia por la pérdida de Lito.
Recuerdo de largas charlas, buscando un poco de sombra en el Club, en hirvientes tardes de verano o mañanas en la que contemplábamos la escarcha que blanqueaba las canchas, desde atrás de los vidrios de quincho.
Podría compartir cientos de anécdotas de momentos pasados juntos; de charlas y de peleas por meternos a la cancha “sin regar”; o de los siempre eternos líos por los horarios de los torneos . . .
Pero, sólo quiero detenerme en una que para Lito era motivo de orgullo, tal como era haber conocido a Alejandro Dolina, con quien compartía el amor por el tango y del saludo que el “Negro” le enviaba muy seguido desde su programa “Demasiado tarde para lágrimas” . . . “¿viste?, ayer me nombró Dolina”, refería Lito cuando yo -o los que sabíamos de su amistad- llegábamos al Club.
Que estés en paz, Lito. Escuchando algún tangazo de esos que te gustaban.
Gustavo Arrivillaga
Que descanses en paz Lito un grande en todo gracias por compartir en las cancha de padle.