Cuando se convencieron, después de lo que habían visto viralizado en las redes sociales, que su hijo de 17 años había sido el responsable de haber incendiado esta madrugada el colegio secundario al que asiste, en Ciudad Evita, lo llevaron a la comisaría, para ponerlo a disposición de la Justicia.
El edificio en el que funcionan la Escuela Primaria N°168 y Escuela Secundaria N°61, en la avenida Central y 600, en el barrio Villegas, en la zona oeste del conurbano, amaneció envuelto en llamas. Muy temprano, en las redes sociales se daba por hecho que el responsable de haber provocado el incendio había sido un alumno de 17 años que, se cree, prendió fuego el establecimiento en represalia por los problemas que tuvo con algunas materias, que no logró aprobar.
En el primer video del hecho que se viralizó a través de Twitter, se decía que el autor del siniestro había sido un chico de 14 años al que, aparentemente, habían expulsado del colegio. Pero luego fuentes policiales precisaron que el responsable del incendio tenía 17.
Según informaron esos voceros, los padres del menor descubrieron la noticia en las redes e interpelaron a su hijo, que terminó por confesarles lo que había hecho. Por temor a eventuales represarías de los vecinos tras la repercusión que había tomado el hecho en las redes sociales, inmediatamente lo llevaron a la comisaría 3a. de Ciudad Evita.
VIDEO
Un menor de 14 años fue detenido acusado de prender fuego un colegio de Ciudad Evita. Sospechan que lo hizo como venganza porque lo habían expulsado del establecimiento. pic.twitter.com/lft90Yphuv
— Mauro Szeta (@mauroszeta) June 17, 2019
La funcionaria de la Dirección General de Cultura y Educación de la provincia de Buenos Aires reveló, Claudia Rodríguez Zerda, que esta mañana realizó una revisión del establecimiento junto a representantes del gobierno bonaerense y Defensa Civil, donde se constataron lo daños provocados por el fuego.
«Ya se planificó la remoción de los escombros, y se visualizó la zona que quedó muy afectada, que es un aula del nivel primario y la biblioteca del secundario, donde se perdieron aproximadamente 300 volúmenes, por lo que ahora se está en la tarea de volver a poner en funcionamiento el edificio», afirmó a Télam Rodríguez Zerda
También indicó que «mañana no se dictarán clases en la escuela, sí funcionará el comedor para todos los chicos, y a los alumnos les daremos tareas para el hogar».
La docente indicó que día a día se evaluará la marcha de los trabajos de reacondicionamiento de los sectores afectados por el incendio, «ya que se está revisando toda la instalación eléctrica».
En la escuela, a la que concurren unos 500 alumnos entre los niveles de jardín de infantes, primario y secundario, «todavía tiene mucho olor a humo y hollín», finalizó Rodríguez Zerda.
En la investigación del siniestro interviene la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) N°2, a cargo del fiscal Emiliano Espatafora. [La Nación]