Cómo es el proceso para que sean aprobados a nivel nacional y por qué es importante que leamos las etiquetas de información nutricional.
En las etiquetas de los alimentos que consumimos todos los días podemos observar información nutricional para conocer acerca de la presencia de aditivos. Este conocimiento es importante, especialmente para aquellas personas que presentan intolerancia o alergia frente a alguno de estos ingredientes.
¿Qué es un aditivo? Es un ingrediente –o sus combinaciones– añadido a la mezcla base del alimento para satisfacer una necesidad específica. Se añaden con el fin de conservarlos evitando su deterioro, también para colorearlos, darles sabor y mantener o mejorar su estructura. A su vez, hay aditivos que actúan de colorante, conservante, antioxidante, estabilizante o emulsionante, potenciador del sabor y edulcorante.
En la actualidad, es casi imposible no ingerir aditivos de síntesis artificial. Hace siglos que se emplean en los alimentos para conservarlos. En los tiempos del imperio romano usaban la sal para conservar la carne. Hoy, por ejemplo, se aplican el azúcar en las mermeladas y el dióxido de azufre en el vino.
La Dirección General de Laboratorio y Control Técnico del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (SENASA) cuenta en su Coordinación de Calidad e Inocuidad de Alimentos de Origen Animal con un Departamento de Evaluación y Desarrollo que realiza la evaluación analítica de aditivos y conexos.
El coordinador Enrique Flores explica que “es importante controlar los aditivos porque hay que ver que se cumpla con la legislación argentina que es el Código Alimentario Argentino (CAA). Hacemos controles básicamente en conservantes para verificar que se cumpla la legislación y se esté usando de manera adecuada. Todo aditivo tiene una dosis máxima de uso permitido. Lo que nosotros hacemos es controlar esa dosis para que no se exceda y al consumidor le llegue un alimento inocuo”.
“Analizamos muestras de importación y de exportación controlando que cumplan con nuestra legislación; también cuando exportamos verificamos que se cumpla con la legislación del país que se va a exportar porque por ahí un aditivo está permitido en Argentina, pero no en el país de exportación”, agregó Flores.
Todas estas medidas permiten brindar al consumidor la seguridad de que está consumiendo un alimento inocuo. Además, se cuida el comercio exterior y se respeta la legislación que cada país exige.
Ante cualquier duda comunicarse con la sede del Centro Regional Pampeano del SENASA, en Chivilcoy, a los teléfonos (0234) 43-6271/72/73.