El secretario de Seguridad, Arturo Pertosa, y el director de Tránsito, Matías Maleichuk, informaron sobre los controles realizados el último fin de semana. Señalaron que la política es de “tolerancia cero” frente a conductas que afectan la paz social.
![]() |
![]() |
La Secretaría de Seguridad de Chivilcoy, junto a la Dirección de Tránsito, personal policial y del grupo GAD, llevó adelante fuertes operativos durante el fin de semana que culminaron con el secuestro de 11 motovehículos. Los controles se centraron en motociclistas que circulaban con caños de escape libres, corriendo picadas y realizando maniobras peligrosas en la vía pública.
El secretario de Seguridad, Arturo Pertosa, explicó que la medida busca erradicar conductas que generan ruidos molestos y ponen en riesgo la seguridad vial. “Tenemos tolerancia cero con quien moleste al vecino. En esta oportunidad se secuestraron 11 motos, y vamos a seguir trabajando porque sabemos que estas prácticas perturban la paz social y el orden público”, sostuvo.
Pertosa remarcó que las motos retenidas quedarán 60 días a disposición de la Justicia, y para su restitución los propietarios deberán abonar multa, acarreo y estadía, además de garantizar que los vehículos cumplan con todas las condiciones reglamentarias: escape reglamentario, chapa patente, seguro y licencia de conducir.
El funcionario también señaló la falta de acompañamiento de algunas familias. “Nos encontramos con padres que reclaman porque se le secuestró la moto a su hijo que circulaba sin licencia y con caño de escape libre. Esto muestra una carencia social que también estamos trabajando desde el área”, indicó.
Por su parte, el director de Tránsito, Matías Maleichuk, detalló que varios de los operativos se realizaron en la zona de “Palmeras”, donde motociclistas molestaban a vecinos que disfrutaban de este espacio público. “Muchos de los infractores ya tuvieron motos secuestradas anteriormente. Incluso, encontramos vehículos con pedido de secuestro y en algunos casos armas blancas en la baulera”, informó.
Maleichuk subrayó que los controles tienen un objetivo preventivo: “Los que corren picadas ponen en riesgo su vida y la de terceros. Les pedimos a los padres que hablen con sus hijos y tomen conciencia”. Finalmente, los funcionarios coincidieron en que la continuidad de los operativos responde al compromiso con la seguridad y la tranquilidad de los vecinos. “Antes, los espacios públicos estaban tomados; hoy todavía hay grupos que molestan, pero ya no como antes, cuando se reunían 60 motos. Esto es fruto del trabajo constante y vamos a seguir adelante”, concluyeron.