Ocurrió luego de las amenazas y la derrota en el clásico santafesino. La custodia estuvo en la práctica del «Sabalero».
Luego de la derrota en el clásico ante Unión y en medio de nuevas amenazas a los jugadores de Colón, las autoridades de provinciales decidieron reforzar la seguridad del plantel, para prevenir cualquier tipo de agresión y que tuvo su punto más álgido en la salida de Alan Ruiz.
Entre seis y siete patrulleros policiales -con 30 efectivos- estuvieron presente en el predio de Colón durante la práctica de este lunes, tras el clásico.
Pero además, la decisión de las autoridades señalaron que esos 30 policías custodiarán las casas de los jugadores, de forma rotativa, algo que continuará hasta el final del certamen.
Consumado el 1-0 en el estadio «15 de abril», los jugadores de Colón y algunos de sus directivos fueron amenazados, tanto vía escrita como por llamadas, en el marco de la crisis que vive la entidad «sabalera».
En el Ministerio de Seguridad se reunieron los principales responsables del área Fernando Peverengo y Fabio Mudry, con autoridades policiales como Adrián Rodríguez, Hernán Ferrero y Juan Pablo Garro, el fiscal Jorge Nessier junto a los dirigentes de Colón encabezados por el presidente, Enrique Ariotti, a quien acompañaron Jorge Giorgetti y Raúl Molinas, y la abogada de Futbolistas Argentinos Agremiados, la doctora Estela Reschia.
No obstante, Fernando Peverengo señaló que no se produjeron denuncias en sede policial, pero sí se realizaron ante el fiscal Omar De Pedro.
Los hechos denunciados hicieron referencia, no sólo a lo ocurrido el miércoles pasado por la agresión a Alan Ruiz al término del entrenamiento que se hizo en el Sindicato Argentino de Televisión, seccional Santa Fe, sino también a lo que pasó el fin de semana, una vez concluido el partido clásico que ganó Unión.
Santa Fe, NA.