Chivilcoy, 08 de agosto de 2017
Desde el Equipo Técnico del Servicio Local de Promoción y Protección de los derechos de los niños, niñas y adolescentes (organismo administrativo cuya función primordial consiste en promover, prevenir, proteger y restablecer los derechos de los niñxs, asegurando su efectivo goce), nos interpela a pronunciarnos respecto del tratamiento periodístico dado, a las publicaciones efectuadas por los diversos medios de comunicación locales, durante la primera semana de agosto del año en curso, las cuales resultan vulneradoras de los derechos de los niñxs involucradxs.
En tales publicaciones (radiales y gráficas) se hizo uso de términos inadecuados, los que llevaron a la tergiversación de la información suministrada, considerando que los medios trabajan con la noticia y la información, pero la información no es mercancía sino un DERECHO.
Queda de manifiesto que se ha perdido de vista la responsabilidad social de los medios y los comunicadorxs.
Los medios abordaron la noticia como “abuso sexual”, siendo que para configurarse una situación como la mencionada debe producirse entre un niñx y un adulto y/o entre un niñx y un adolescente si hay una significativa disparidad en la edad, desarrollo, tamaño o aprovechamiento de ello.
Al brindar información respecto de los niñxs afectados, los medios de comunicación menoscabaron su integridad conculcando con ello los derechos a la intimidad y confidencialidad consagrados en la Constitución Nacional, en la Convención de los Derechos de los Niñxs y las leyes 26.061, 13.298 y 25.326 (Habeas Data).
La cobertura periodística traída a examen causa un gran daño y afecta la integridad de los niñxs, vulnerando sus derechos, considerándose a su vez que se privilegió la versión policial de los hechos, obstaculizando el tratamiento del tema como fenómeno psicológico y social complejo. Divulgar información y/o imágenes, como la identidad de la progenitora y el nombre de la Institución educativa a la que concurren los niñxs, devela la identidad de aquél y/o aquéllxs a los que se debería proteger, no sólo por los medios de comunicación sino también por las Instituciones que los mismos convocan para la cobertura de la noticia.
Cuando se habla de vulneración de derechos, se debe contemplar la no estigmatización del niño o niña, evitando valoraciones o descripciones que lo expongan a sufrir represalias, en especial daños físicos o psicológicos adicionales, o a padecer de por vida maltrato, discriminación o rechazo por parte de su comunidad. (Principios éticos para informar acerca de la niñez. Herramientas para un periodismo con enfoque de derechos-UNICEF).
Es común escuchar expresiones de asombro o indignación justificadas ante este tipo de violencia. El desafío es transformar esos sentimientos en coberturas que colaboren para colocar el tema en agenda de forma adecuada, contextualizándolo correctamente, respetando a sus protagonista y a las personas que los acompañan, pidiendo la colaboración de especialistas en género, niñez y adolescencia para elaborar la noticia.
La facilidad y el ansia de “primicia” no deben llevar a vulnerar derechos.
Servicio Local de Promoción y Protección de los Derechos del Niñx y Adolescente.