Por Guillermo R. Pinotti | Concejal FR
El estudio del diagnóstico de situación y comprensión de la realidad tributaria del municipio de Chivilcoy, ha llevado a la actual administración a tener un pensamiento superador y aplicar el concepto del principio de progresividad.
Esto es un sistema tributario justo y equitativo que permite cobrar más a quienes tengan mayor capacidad contributiva; cobrar menos – a través de una tarifa básica – a quienes tengan una inferior; y eximir a quienes no la tengan.
Con respecto a estos últimos, pensando en promover y favorecer su inclusión e integración social para su recuperación, y que sean en el futuro también partícipes activos desde el punto de vista contributivo.
De esta manera, en virtud de la equidad horizontal, las personas con capacidad económica igual deben contribuir de igual manera mientras que, de acuerdo con la equidad vertical, las personas con mayor capacidad económica deben contribuir en mayor medida.
De esta forma, el principio de equidad exige que se graven, conforme a la evaluación efectuada, los bienes o servicios cuyos usuarios tienen capacidad de soportar el impuesto, mientras que se exime del deber tributario a quienes, por sus condiciones económicas, pueden sufrir una carga insoportable y desproporcionada como consecuencia del pago de tal obligación legal.
En el mismo sentido, al delimitar el alcance del principio de equidad tributaria, establece que en el proceso de imposición de determinada carga tributaria se debe tener en cuenta de manera específica la situación en que se encuentran quienes están llamados a contribuir y su capacidad de pago, con lo cual adquieren connotación los conceptos de equidad horizontal y equidad vertical.
Pero el alcance del principio de equidad tributaria no se agota en la consideración efectiva de las diferencias reales que existen entre los potenciales sujetos obligados.
La equidad impone el respeto no sólo por las diferencias de ingreso y bienestar de los contribuyentes, sino también especialmente los principios derivados del Estado Social de Derecho.
Así, la capacidad contributiva no es el único principio a valorar por esta administración en el sistema. Y esto lo hemos tenido en cuenta: es necesario proteger otros valores que se encuentran en la Constitución como son la protección de los derechos fundamentales al trabajo y a la familia, protección a la libertad personal que implica el reconocimiento de un mínimo de recursos para la existencia personal y familiar que constituye la frontera a la presión fiscal individual, todo complementado con los principios del Estado Social, que no deben ser antagónicos a los de las libertades personales y patrimoniales sino moderadores de ellas.
Por eso se consideran descuentos a los contribuyentes que están al día con los pagos, creación de una “Tarifa básica” para la Tasa de Servicios Públicos que implica una reducción del 50 % en el valor liquidado; exención de pago a quien no tenga posibilidades y eximición a través del Poder Ejecutivo, con convalidación del Honorable Concejo Deliberante valorando por encuesta social previa y con carácter extraordinario.
Al establecimiento de la tarifa básica – del 50 % de la tarifa normal, accederán a ella quienes cumplan con los requisitos definidos y cuya información será recabada por el SINTyS – Sistema de Identificación Nacional Tributario y Social -, organismo dependiente del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación.
El Sistema de Identificación Nacional Tributario y Social (SINTyS) es un programa gubernamental creado para brindar transparencia a la asignación de beneficios sociales y aumentar la efectividad de las políticas fiscales en Argentina. Su misión es lograr la identificación unívoca de las personas a través de la coordinación del intercambio de las numerosas bases de datos que existen en los organismos nacionales, provinciales y municipales del país para que la información social y fiscal de la población no resulte fragmentada, desarticulada e inconsistente.
El mecanismo para la solicitud de exención de tasas que actualmente se realiza mediante aplicación de ordenanzas; pasará a ser automática, también por cruce de información derivada del SINTyS – Sistema de Identificación Nacional Tributario y Social.
No debemos olvidar que la equidad, eficiencia y progresividad tributarias hacen alusión al sistema en su conjunto y en su contexto, y no a un determinado tributo aisladamente considerado.
Para finalizar recordemos que la equidad social supone la aplicación de los derechos y obligaciones de las personas de un modo considerado justo y equitativo, Y para lograr una verdadera justicia social, todas las personas, además de tener los mismos derechos políticos y civiles, debemos tener las mismas posibilidades de acceder al bienestar social, y, en este sentido, el mismo derecho y las mismas oportunidades a la educación, a la salud y al trabajo.
Cuando hablamos de tributos, los vecinos debemos recordar, que este tema está plasmado en nuestra Constitución Nacional, como así también en cada una de las Constituciones Provinciales. Es muy importante aclarar que existe un principio tributario, el de legalidad, que establece que “no hay tributo sin ley”. En consecuencia, podemos decir que todo tributo surge de una ley y el que no lo paga está violando la ley.
Pero más allá de lo legal y administrativo – y haciendo referencia al espíritu de las leyes y ordenanzas – nada se puede construir sin tener en cuenta la “Buena Fe” de las partes o personas; de los contribuyentes en el contexto de sus derechos y obligaciones y de quien gobierna y administra la justa distribución de la riqueza proyectada al bien común y la igualdad de oportunidades.
Es imposible concebir el bien común y la igualdad si, aunque sea un solo ciudadano, privilegia el bien propio por sobre el bien del prójimo. Y la verdadera distribución de la riqueza nace en el corazón y el sentimiento de justicia dentro de cada uno de nosotros, despojados del egoísmo, la avaricia, vanidad y; con el pleno conocimiento que, donde una obligación no se cumple se está postergando el derecho de otros en otro lado. Y donde nace una necesidad – como dijo Eva Duarte – nace un derecho. Solamente con verdadera cooperación, responsabilidad y sentimiento patriótico de igualdad, podremos construir desde Chivilcoy – trabajando de este modo -, la Argentina que todos queremos.