La FDA dio el respaldo pleno a la formulación, que dejará de tener el status de “uso de emergencia”.
Todas las vacunas que se aplican en el mundo obtuvieron oportunamente una autorización de emergencia en el marco de la pandemia por COVID-19, lo que implica que, si bien estudios preliminares dieron cuenta de su eficacia y seguridad, la Fase III continuó en marcha mientras comenzó a inmunizarse a la población.
Ahora, así como el 2 de diciembre de 2020 la formulación de Pfizer y BioNTech contra el COVID-19 fue la primera en recibir esa autorización de emergencia y comenzar a ser aplicada en el Reino Unido, la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés) acaba de darle la autorización total en los EEUU.
“Una Autorización de Uso de Emergencia (EUA, por sus siglas en inglés), es un mecanismo para facilitar la disponibilidad y el uso de contramedidas médicas, incluidas las vacunas, durante las emergencias de salud pública, como la actual pandemia causada por el COVID-19″, explicaron desde la agencia reguladora.
En tanto, la aprobación plena implica que todos los requisitos exigidos por la FDA, especialmente los relacionados con estudios de largo alcance para descartar efectos nocivos, fueron cumplidos, en este caso, por la vacuna de Pfizer.