No nos vamos a unir con quienes no tenemos nada en común y no representan en lo más mínimo los ideales del peronismo en cuanto a la cultura del trabajo, la educación pública y la producción.
Ideales y principios que cuando nos tocó representarlos y gobernar nuestra ciudad ¡les hicimos honor!, generando trabajo genuino, fortaleciendo la formación profesional, creando un centro universitario, alentando la producción, radicando empresas, construyendo escuelas, fortaleciendo la educación pública y generando cultura del trabajo.
En el ámbito partidario y democrático, respetamos siempre las internas y de ellas surgimos como candidatos. Las autoridades partidarias se elegían en todos los niveles entre afiliados con conocimientos y oriundos, cada uno de ellos, de los territorios que pretendían representar, en todos los niveles.
Nada de eso han procurado o intentado hacer quienes en nuestra provincia y en nuestra ciudad invocan formalmente la representatividad del peronismo, aun teniendo en su poder todas, absolutamente todas, las herramientas para haber podido lograr una gestión digna.
En dicho orden, comenzando por quien preside, puesto a dedo, el Peronismo de la provincia de Buenos Aires, delegado inconsciente y antidemocráticamente por la expresidenta.
Dirigente santacruceño que preside el histórico partido que más veces ha gobernado la provincia de Buenos Aires y de la cual no tiene el más mínimo conocimiento. Dirigente que de la misma manera en que llegó a la presidencia del PJ Bs. As., a dedo, en forma excluyente y antidemocrática, elige a los candidatos de su agrupación “La Cámpora”, como en nuestro distrito a su candidata dotándolos de todos los poderes y recursos públicos de la administración: ANSES, PAMI, Región Sanitaria, Registro de las Personas, etc., descartando de plano a cualquiera que se le cruce, por más válido que sea si no pertenece a su agrupación.
Por eso, y por mucho más, a todos los que proponen unión, les digo que “el agua y el aceite no se mezclan” y menos con quienes ilegítima y antidemocráticamente están ocupando un espacio que no se ganaron, que no les pertenece y al que no le hacen el más mínimo honor.
Algún historiador escribirá algún día sobre la autodestrucción del peronismo por delegación decretada a inoficiosos, falsos militantes, que no les costó nada en su vida política llegar a tomar el poder partidario para luego dilapidarlo, logrando nada más y nada menos, en una primera instancia de su fracaso en la gestión política, hacer presidente a Macri y, en este segundo fracaso, a punto de hacer presidente a quien dicen combatir.
Estamos convencidos de que Chivilcoy volverá a tomar el camino que lo supo hacer crecer y desarrollarse en serio, con quienes tengan la capacidad de integrar a todos los chivilcoyanos detrás de un proyecto del cual se sientan parte. Lo hicimos una vez, sabemos cómo hacerlo ¡y lo volveremos a hacer!
Ariel, te querés hacer el diferente, pero yo te vi besar las manos del matrimonio chorro de la nación, en contra de tu propio pueblo… llamáte a retiro a disfrutar de tu bienestar económico y no aparezcas mas por acá