La figura prevé hasta la eximición de la pena para el informante. El texto se encuentra en revisión del Poder Ejecutivo antes de llegar al parlamento.
El proyecto oficial de «Ley del Arrepentido» en casos de corrupción ya está prácticamente listo para ser enviado al Congreso y prevé hasta la eximición de la pena para aquellos que colaboren con desbaratar o esclarecer delitos contra la administración pública.
La iniciativa fue elaborada por la Oficina Anticorrupción y se encuentra en revisión del Poder Ejecutivo antes de llegar al parlamento, presumiblemente después de la exposición del jefe de Gabinete, Marcos Peña, en la Cámara de Diputados, el 13 de abril.
El envío del texto fue anunciado por el presidente Mauricio Macri en una entrevista que dio el miércoles antes de partir hacia la Cumbre de Seguridad Nuclear en Washington.
Si bien el texto ya estaba redactado, el anuncio pareció una respuesta a los últimos embates de la diputada Elisa Carrió, quien toma la agenda anticorrupción como una de sus prioridades.
Para el Ejecutivo, la figura del arrepentido puede acelerar o activar investigaciones por corrupción, en momentos en que se encuentran en la mira de la Justicia funcionarios del gobierno kirchnerista, incluida la presidenta Cristina Fernández.
En ese contexto, el financista Federico Elaskar, uno de los procesados en la causa por lavado de dinero de Lázaro Báez, ya anticipó que podría acogerse a régimen y ampliar las revelaciones surgidas en las últimas semanas en el expediente.
Fuentes oficiales y parlamentarias señalaron que legisladores del Frente para la Victoria pusieron reparos para prestar su aval al proyecto, que será enviado junto a otro de recupero de activos o extensión de dominio de bienes surgidos de la corrupción.
«No están muy de acuerdo. Es probable que usen como argumento que no se puede negociar con delincuentes, pero el objetivo final sería evitar que se destapen más ollas del último gobierno», señaló una fuente con llegada a ambos poderes.
No obstante, el régimen penal argentino ya incorporó esta figura para casos de secuestros extorsivos, tenencia y tráfico de estupefacientes, terrorismo y trata de personas.
En Sudamérica, la incorporación de la figura del arrepentido en la legislación permitió desentrañar el escándalo de corrupción del gobierno de Alberto Fujimori, en Perú.
En Brasil, desde la sanción de una ley del arrepentido en 2013, avanzaron por esta vía los casos «Mensalao», donde existía un esquema de sobornos mensuales a legisladores para apoyar proyectos provenientes del Poder Ejecutivo, y «Petrolao» por el cual se descubrió una gigantesca red de corrupción pública-privada que llevó al empresario Marcelo Odebrecht a 19 años de prisión.
Más allá de la posición del FPV, en el Congreso argentino se da por seguro el apoyo de Cambiemos, del Frente Renovador y de otros sectores de la oposición, teniendo en cuenta que presentaron iniciativas en este sentido Julio Cobos, Sergio Massa y Margarita Stolbizer.
El proyecto se encuentra desde el lunes pasado bajo el análisis del ministro de Justicia, Germán Garavano, luego pasará por la Secretaría de Relaciones Parlamentarias que conduce Paula Bertol y la de Legal y Técnica, a cargo de Pablo Clusellas, quien debe hacer firmar el envío al Presidente.
Fuentes oficiales señalaron que «es interés de Macri que salga cuanto antes».
Buenos Aires, NA.