El reconocido fotógrafo Emmanuel Borao, quien ya ha impactado con su obra en el pasado, regresa con una propuesta que va más allá de lo estético: una profunda exploración visual de la expansión de las iglesias evangélicas en Latinoamérica. A través de su lente, Borao no solo retrata espacios y personas, sino que invita al espectador a una reflexión sobre el papel de la fe y la contención social en los barrios, revelando historias ocultas en la arquitectura y en la vida de aquellos que buscan un camino.
La Fotogalería 22 se vistió de gala este sábado por la noche para inaugurar una nueva exposición del reconocido fotógrafo Emanuel Borao, quien presenta uno de sus más recientes trabajos. Una serie que explora la expansión de las iglesias evangélicas en Latinoamérica, ofreciendo una perspectiva única y reflexiva.
La mirada del curador Daniel Muchiut
Sobre el artista, Daniel Muchiut, Curador del espacio, expresaba “yo creo que es uno de los artistas más talentosos de la Provincia de Buenos Aires, de su generación». Recordó además la exitosa exposición anterior de Borao, «Vademécum», que hace una década abordó la industria farmacéutica y la adicción a los medicamentos. «Ahora viene con otra mirada sobre la iglesia evangélica, una muestra notable, realmente maravillosa que estamos a punto de disfrutar en esta inauguración», añadió Muchiut.
Emmanuel Borao sobre su obra
Al ser consultado sobre esta nueva obra, explicó la evolución de su trabajo: «Este laburo… es un laburo que aborda la expansión de las iglesias evangélicas en Latinoamérica. Son fotografías realizadas en los exteriores e interiores». Destacó que gran parte de las iglesias retratadas se encuentran en las periferias de los barrios de diversas ciudades de Argentina y Bolivia. Esta búsqueda, según el artista, guarda una conexión con su trabajo anterior: «Tiene esta cuestión de lo que necesita la gente para sobrellevar la vida. La cuestión del consumo, consumir, la espiritualidad en este caso».
El rol social de las iglesias evangélicas
El autor también resaltó el rol social de estas iglesias: «También son lugares que le ofrecen contención, que no funcionan solamente desde lo religioso. Tienen una función social en los barrios. Que se van multiplicando y multiplicando».
Al abordar la constante expansión de estos espacios religiosos, el fotógrafo planteó una reflexión en el sentido que muchas veces ocupan lugares que ni «la Iglesia Católica ni el Estado tampoco cubren, porque son barrios por ahí que no tienen nada, ni una plaza. Y está la Iglesia, que es el lugar donde puede ir la gente».
La reutilización de espacios
Un detalle que captó la atención de Borao durante su investigación fue la forma en que los espacios evangélicos a menudo reutilizan estructuras que tenían un propósito diferente. El fotógrafo lo explica así: «Eran espacios que fueron creados para otro uso. Eran talleres mecánicos, ahí en lo literal, la arquitectura no fue pensada como una iglesia evangélica. Se construyó y quedan huellas». Sus fotografías, de hecho, se encargan de revelar esas «huellas del pasado» que aún se perciben en la arquitectura de estos lugares de culto.
La interacción con los pastores
En cuanto a la interacción con las personas retratadas, en su mayoría pastores, Emmanuel comentó sobre la facilidad con la que obtuvo su colaboración: «Los que fueron retratados no tuvieron problemas». Explicó su metodología para encontrarlos: «Yo lo que hacía para buscarlos era buscar las iglesias, identificarlas y preguntarle a algún vecino dónde vivió el pastor. Habitualmente saben… la mayoría, todos los que están retratados vivían ahí cercanos, o tenían la iglesia en una parte de la casa o estaban a la vuelta».
El enfoque inicial
Borao compartió una revelación personal sobre su enfoque inicial: «Yo empecé el laburo desde un prejuicio, un estigma, por ahí desde los pastores que uno ve en la televisión, casi millonarios, así, y estos eran tipos que estaban ahí y tenían, algunos por ahí habían dejado el oficio y se habían dedicado exclusivamente».
Exposiciones anteriores
Este trabajo ya ha sido expuesto anteriormente. «Lo mostré el año pasado en la Fotogalería Meridiano 0, de Chacabuco, y algunas partes en muestras colectivas, en Mendoza, hace un par de años».
Invitación a la comunidad
Para finalizar, Daniel Muchiut, Curador de la sala, hizo una invitación a la comunidad: «La muestra va a estar abierta durante junio y julio, sabemos que el museo tiene una función social, que vienen escuelas, bueno, están todos invitados a recorrer la Fotogalería, y encontrarse con una gran exposición».
La exposición de Emanuel Borao estará abierta al público durante los meses de junio y julio en la Fotogalería 22. Una oportunidad imperdible para reflexionar sobre un fenómeno social y cultural a través de la lente de un artista talentoso.
VIDEO
Ver esta publicación en Instagram