Estiman que una familia podría tardar hasta 234 años en adquirir una vivienda si sus ingresos cubren apenas la canasta básica alimentaria. Sin posibilidades de ahorro.
Una familia tipo con ingresos por encima de la línea de pobreza tardaría 99 años en adquirir una vivienda, mientras que una que cubre la canasta básica alimentaria, al ubicarse por encima de la línea de indigencia, necesitaría más de 234 años, según un informe privado.
Los datos surgen de un estudio elaborado por el Centro de Investigación de Política Urbana y de Vivienda (CIPUV) de la Universidad Torcuato Di Tella.
Para hacer ese cálculo, tomó el valor de la canasta básica alimentaria, cuyo valor es de $5.176, y la total, con un precio de $12.489.
«Si se considera una familia compuesta por dos personas adultas y dos niños de entre 6 y 8 años de edad, la canasta básica alimentaria y la canasta básica total tienen un valor de $5.176 y $12.489, respectivamente», sostuvo.
En ese sentido, indicó: «De acuerdo con estos datos, y al considerar un lote promedio, una familia con ingresos familiares por encima de la línea de pobreza tardaría 99 años en adquirir una vivienda, mientras que una familia que cubre la canasta básica alimentaria necesitaría más de 234 años».
«Si nos centramos en los lotes menores a USD 100 por metro cuadrado, lo cual representa sólo el 2% de la oferta, las familias sobre la línea de pobreza tardarían 32 años en pagar el terreno y la vivienda, mientras que las familias sobre la línea de indigencia lo harían en 75 años», estimó.