En este sentido, indicó que “estamos tratando que los pacientes vuelvan sin miedo al consultorio y que se hagan los controles normalmente como lo hacían antes de la pandemia”.
El odontólogo Nicolás Giaccone brindó importantes recomendaciones para la prevención de patologías bucales y se refirió a la forma de atención actual en los consultorios ante el aumento de casos de Covid-19.
En relación a esto último, el profesional indicó: “A pesar del incremento de casos y de la situación actual de la pandemia, hoy podemos trabajar siguiendo ciertos protocolos, pero con todas las prestaciones. Tenemos el cuidado que corresponde tanto para el profesional como para el paciente”.
“Estamos tratando de ir solucionando los problemas que los pacientes vienen arrastrando desde hace un tiempo cuando no se podían hacer trabajos preventivos. Hoy en día están acudiendo a las consultas para poder hacer este tipo de tratamientos y solucionar lo que quedó pendiente o fue apareciendo en este tiempo”, sostuvo.
Y remarcó: “En general estamos trabajando contrarreloj porque al no tener la prevención que correspondía, se está actuando mucho sobre la enfermedad, intentando revertir esta situación y hacer controles como se hacía prepandemia”.
Seguidamente, Giaccone enfatizó: “La prevención es lo más importante” y llamó la atención sobre patologías que se están viendo por “falta de hidratación en los días de mucho calor”.
“El paciente se tiene que hidratar mucho más de lo que lo hace normalmente en la época en que no son tan altas las temperaturas”-recomendó- y agregó que “es importante que tengan una muy buena hidratación para mantener la boca húmeda para tener saliva en la boca que es la principal barrera para protegernos de que no se formen caries”.
En este sentido, aconsejó: “Es fundamental tomar agua y evitar la exposición al sol lo máximo posible. Aquellas personas que trabajan al aire libre, expuestas al sol y al viento, producen un montón de patologías, sobre todo en la zona de los labios, ya que los carrillos se resecan y se quiebran”.
Y añadió: “Se forman las llamadas boqueras, que da lugar a que se quiebran los labios, generando ardor y quemazón, que no son buenos, y que hay que controlarlos, porque si se forman muy seguido hay que prestar atención y controlarlos”.
Por último, el odontólogo subrayó: “Estamos tratando que los pacientes vuelvan sin miedo al consultorio y que se hagan los controles normalmente como lo hacían antes de la pandemia”.