El entrenador de Lanús, Jorge Almirón, se enojó con su sucesor en la dirección técnica de Independiente, Gabriel Milito, y le advirtió que se van a ver «cara a cara», además de acusarlo de «mariconear» en el final del encuentro al «hablarle» al delantero ‘granate’ Lautaro Acosta.
«Los técnicos no podemos meternos porque los que juegan son los futbolistas y cuando están calientes menos, pero además hay que respetar a los rivales y no ‘mariconear’ como hizo Milito. Por eso ya nos vamos a ver cara a cara», disparó el técnico de Lanús.
«Es que dentro de una serie pareja hoy Independiente ganó bien, porque esencialmente la diferencia la hizo allá. Por eso no me gustó que Milito increpe a Acosta, ya que nosotros debemos ser respetuosos de los rivales», remarcó Almirón.
Pese a la eliminación el entrenador de Lanús sostuvo que la imagen de su equipo «fue buena, aunque el arbitraje de esta noche (del paraguayo Enrique Cáceres) no estuvo a la altura. Pero nosotros, más allá de los tres goles de desventaja, nunca nos volvimos locos ni perdimos la cabeza».
«Y personalmente viví una linda sensación de volver a este estadio y que viniera toda la gente del club a saludarme. Por eso estoy agradecido a la institución que me albergó en su momento y solamente me queda felicitarlos por la clasificación», amplió respecto de su retorno al Libertadores de América.
Las versiones sobre lo ocurrido al final del juego y el origen de las mismas indicaban, según fuentes del equipo local, que Acosta había salivado a Milito, aunque desde el vestuario de enfrente puntualizaron que la reacción del «Laucha» se debió a un insulto del técnico de Independiente. Al final, la sangre no llegó al río.