Una delegación local participó de uno de los encuentros tradicionalistas más importantes del país.

El domingo 16 de noviembre se llevó a cabo una nueva edición de la Fiesta de la Tradición en el pago gaucho de San Antonio de Areco, considerada por muchos como la cuna misma de la argentinidad y del espíritu criollo. Como cada año, esta celebración reunió a miles de turistas y visitantes que colmaron sus calles, bares, pulperías y boliches, atraídos por la estética paisana, las artesanías, la música y la identidad que Areco respira en cada rincón.
La Fiesta de la Tradición de Areco es, sin dudas, uno de los acontecimientos más destacados del calendario tradicionalista nacional. Durante toda la jornada desfilaron paisanos de distintos puntos del país, luciendo con orgullo sus pilchas domingueras, mostrando la diversidad de estilos, aperos y arreglos que forman parte del patrimonio cultural del hombre y la mujer de campo. El colorido de los recados, las tropillas, las destrezas ecuestres y la presencia de grupos tradicionalistas hicieron que el pago gaucho volviera a brillar con la impronta de siempre.
Este año, Chivilcoy estuvo representado por una delegación de la Peña La Amistad, integrada por tradicionalistas locales que viajaron especialmente para participar del festejo. Entre ellos se encontraban Carlos, Martín y Sebastián Di Siervi, Julián Dabi, Juan Pauletti, Juan Salinardi y Martín Jauregui, quienes recorrieron la fiesta, acompañaron el desfile y llevaron la presencia chivilcoyana a uno de los escenarios más emblemáticos de la cultura criolla argentina.
Desde la organización destacaron, una vez más, el espíritu federal que caracteriza a la jornada, donde cada pago aporta su identidad y su gente. La presencia de la delegación chivilcoyana reafirma el compromiso y la continuidad del tradicionalismo local, que año a año dice presente en los encuentros más importantes del país.
La Fiesta de la Tradición volvió a confirmar por qué Areco es referencia obligada para quienes aman y defienden la cultura criolla. Y Chivilcoy, como siempre, estuvo ahí, firme, acompañando y participando como parte viva de esa historia.





