Así se expresó, en la carta en la cual manifestó su renuncia indeclinable a la Presidencia del PJ.
Mauricio Maggi, quien, en la noche de este viernes, renunció a rol como presidente del Partido Justicialista, envió una carta al Consejo Partidario, con el objeto de explicar las razones de su decisión y expresar su agradecimiento a sus compañeros. Asimismo, criticó fuertemente a los dirigentes locales del Frente de Todos, a quienes acusó de sometimiento y avallasamiento.
En primer lugar, aclaró que se trata de una «renuncia con carácter de indeclinable». Seguidamente, expresó: «Para mí ha sido un honor haber resultado electo por los afiliados como vicepresidente para luego asumir el cargo de presidente, pero la verdad es que no puedo seguir ejerciendo mi función, puesto que, si bien es un enorme orgullo pertenecer al partido en el que milito desde hace más de veinticinco años, el PJ está dentro de un frente que la verdad, dicho esto con un enorme dolor, no me representa como peronista».
«Y digo con un enorme dolor puesto que había, al igual que millones de argentinos, depositado grandes esperanzas en el Frente de Todos, pero me encuentro terriblemente desilusionado, agregó.
A continuación, enumeró los argumentos que lo alejaron de cargo: «así las cosas, no puedo sentirme orgulloso de pertenecer a un gobierno que es gran responsable de que siete de cada diez chicos en la Argentina no tengan un plato para comer; un gobierno que a años luz de la educación que fomentaba el Gral. Perón, ha cerrado las escuelas durante casi un año en el 2020 y prácticamente lo que va del 2021, ya que si bien se dictaron algunos días de clase este año, en algunos distritos hay chicos que directamente no tuvieron clases presenciales; un gobierno que ha empobrecido a millones de argentinos con su desmadrada y arbitraria cuarentena privándolos del bien más preciado para el ser humano digno, la posibilidad de trabajar y ganarse su propio sustento diario; un gobierno que bajo el lema de no importarle incrementar el porcentual de pobreza so pretexto de cuidarnos, al día de hoy se encuentra no sólo con más pobreza sino con una cifra de más de cien mil muertos, cifra que sin dudas nos duele a todos; un gobierno que antes de vacunar a personal de salud, seguridad, educación, a nuestros abuelos , etc., priorizó a militantes de una agrupación política , a actuales y ex funcionarios y a todo un universo de privilegiados amigos del poder de turno; en fin, un cúmulo de hechos y cosas que hacen que el frente que hoy nos gobierna haya sido una enorme desilusión para millones de argentinos que en su momento creímos y acompañamos este proyecto».
En este sentido, Maggi aseguró que «priorizó sus convicciones», aunque exista la posibilidad de que sea catalogado de «traidor” por pensar distinto.
En relación a esto, sostuvo: «Sé que seré duramente criticado por mis palabras y algunos hasta me tildarán de traidor, es lo que hacen cuando alguien piensa distinto y se atreve a expresarlo, pero tengo que ser honesto con los compañeros/as que me eligieron y, sobre todo, como siempre lo fui, conmigo mismo y mis convicciones».
Más tarde, se explayó respecto al Partido Peronista, sobre lo que indicó: «Espero haber estado a la altura de las circunstancias y haber representado fielmente a los compañeros/as que me eligieron para el cargo; si algún error he cometido pido las disculpas del caso, pero siempre fue en el convencimiento de estar haciendo lo mejor para el partido. Partido al que todos dicen pertenecer y tantas veces han bastardeado y ninguneado pero que siempre utilizan de trofeo por saber que es sin lugar a dudas el más grande de la argentina , más allá de que a nivel nacional hoy es presidido por un Social Demócrata que no fue electo por los afiliados sino por convenientes acuerdos políticos , a nivel provincial por quien ni siquiera cumple los requisitos exigidos en la carta orgánica para ejercer ese cargo, pero que importa, si después de todo no fue elegido por la voluntad de los afiliados sino por una caterva de lame botas y alcahuetes del poder que buscan congraciarse y/o que acompañaron esta arbitraria designación por temor a represalias políticas».
No menos duro fue con los dirigentes a nivel local, contra quienes apuntó fuertemente: «Ni que hablar del ámbito local, donde para que haya consenso debemos someternos a la voluntad de unos pocos y acatar sus decisiones inconsultas, o bien avasallándonos con la imposición de candidatos carentes de legitimación para serlo y negándonos a quienes legítimamente detentamos el poder, el derecho a competir en unas PASO, mediante las cuales se vea fielmente reflejada la voluntad del peronismo chivilcoyano, a través de conductas a las que ciertas agrupaciones que se dicen peronistas nos tienen acostumbrados , secundados por un grupo de obedientes y funcionales al poder y en pos de cuidar los cargos con los que por su obsecuencia fueron premiados».
Para finalizar, él ahora es presidente del PJ, exclamo: «Seguiré siendo, desde donde me toque estar, un eterno militante y sonando con un peronismo verdadero como el de nuestro conductor que nos lleve por fin a una Argentina grande, solidaria, libre y soberana, es decir con una Argentina con la que San Martín soñó».