El Día Mundial de la Poliomielitis fue establecido por el Rotary International para conmemorar el nacimiento de Jonas Salk, quien dirigió desde 1952 en la Universidad de Pittsburgh el primer equipo para desarrollar una vacuna contra la poliomielitis, la que fue autorizada en 1955 para su uso generalizado en los niños. El uso de esta vacuna de poliovirus inactivado y el uso generalizado subsiguiente de la antipoliomielítica oral, desarrollada con posterioridad por Albert Sabin en 1957 y autorizada en 1962, ha logrado reducir la polio en todo el mundo en un 99%.
La poliomielitis es una enfermedad muy contagiosa que afecta principalmente a los niños. El virus se transmite de persona a persona principalmente por vía fecal-oral o, con menos frecuencia, a través de un vehículo común, como el agua o los alimentos contaminados, y se multiplica en el intestino desde donde invade el sistema nervioso y puede causar parálisis y hasta la muerte por parálisis de los músculos respiratorios. Los síntomas iniciales son fiebre, cansancio, cefalea, vómitos, rigidez del cuello y dolores en los miembros. En una pequeña proporción de casos la enfermedad causa parálisis, a menudo permanente. La poliomielitis no tiene cura, pero es prevenible por medio de la inmunización.
Los principales actores de la Iniciativa Mundial para la Erradicación de la Polio son la Organización Mundial de la Salud, Rotary International, los Centros de Estados Unidos para Control y Prevención de Enfermedades y el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia, y cuenta, además, con el apoyo financiero de los gobiernos nacionales y donantes del sector privado.
La Organización mundial de la Salud declaró en 1988 que “la erradicación de la polio es una emergencia programática para la salud pública mundial”.
Rotary International, uno de los principales actores en esta lucha, es una organización humanitaria mundial con más de 1,2 millones de socios en 35.000 clubes rotarios, distribuidos en más de 200 países y regiones. Los rotarios son hombres y mujeres líderes en sus actividades profesionales, empresariales y comunitarias, consagrados a mejorar el mundo a través del servicio a la humanidad. En 1985, lanzó su principal programa llamado PolioPlus y gracias al esfuerzo de sus clubes junto con sus aliados en la campaña, han logrado reducir el número de casos de polio de 350.000 al año a menos de 400 en 2014 y en 2015, se declaró a Nigeria país libre de Polio. De tal suerte que al día de hoy sólo existe la enfermedad en Afganistán y Pakistán. Los rotarios realizamos una campaña que finalizó exitosamente hace poco tiempo llamada “Desafío de 200 millones”, con la que se consiguió esa suma en aportes de particulares en el mundo, destinados a combatir este flagelo. Rotary ha contribuido con más de U$S 1.400 millones y un sinnúmero de horas de trabajo voluntario dedicado a la protección de más de dos mil millones de niños en todo el mundo, en 122 paises. Además, las labores de incidencia política de la organización han contribuido al aporte de más de U$S 10.000 millones por parte de distintos gobiernos del mundo. A pesar de que la polio es aún un mal endémico en solo dos países, Afganistán y Pakistán, existe el riesgo de reinfección por casos importados en otras naciones.
Los rotarios no bajaremos la guardia hasta conseguir erradicar este flagelo teniendo la firme convicción y conciencia de la necesidad de llevar adelante el programa Polio Plus y trasmitir el mismo en todas las comunidades en las que nos desarrollamos.